“En la unidad de la Divinidad hay tres personas de una sustancia, poder y eternidad; Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo. El Padre no es engendrado ni procede de nadie; el Hijo es eternamente engendrado del Padre, y el Espíritu Santo procede eternamente del Padre y del Hijo.” (Confesión de Fe de Westminster)
La Trinidad es la enseñanza que afirma que hay un solo Dios en toda la existencia y que existe en tres distintas, simultáneas, co-eternas, co-poderosas personas conocidas como el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
La palabra “trinidad” no sólo indica la cantidad de tres sino que también implica la unidad de los tres. A propósito Matt Slick escribe: “Dios es una trinidad de personas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. El Padre no es la misma persona que el Hijo; el Hijo no es la misma persona que el Espíritu Santo; y el Espíritu Santo no es la misma persona que el Padre. No son tres dioses y no tres seres. Son tres personas distintas; sin embargo, todos ellos son el único Dios. Cada uno tiene una voluntad, pueden hablar, pueden amar, etc. Estas son manifestaciones de personalidad. Ellos están en perfecta armonía absoluta. Son co-eternos, co-iguales, y co-poderosos. Si alguno de los tres fuese removido, no habría Dios.”
La Biblia da testimonio de esta doctrina de manera explicita en el N.T. y de manera implícita en el A.T.
La Trinidad en el Antiguo Testamento
En el A.T. encontramos algunas evidencias de la Trinidad, tales como:
– Pronombres en los cuales Dios usa el “nosotros” y “nuestro” (Génesis 3:22; Génesis 11:7; Isaías 6:8), siendo la mas clara e importante referencia Gén. 1:26-27.
– Teofanías, en las cuales Cristo aparece como el “Ángel de Jehová”
El Antiguo Testamento presenta un ser que aparece en forma de hombre y que actúa y habla como Dios (Gén 16:7-8; Gén 22:11-18; Ex. 3:2-6; Zacarías 12:8)
En cuanto a la Trinidad en el Antiguo Testamento, el teólogo Louis Berkhof dice: “La revelación más completa de la Trinidad en el Nuevo Testamento se debe al hecho de que el Verbo se hizo carne y el Espíritu Santo hizo su habitación en la Iglesia”.
La Trinidad en el Nuevo Testamento
En el Nuevo Testamento la doctrina de la Trinidad es más clara, veamos a continuación un pequeño cuadro comparativo:
La doctrina de la Trinidad y las sectas
Los actuales “Cristianos Unitarios” niegan la doctrina de la Trinidad. Y esto no es algo nuevo, en el siglo XII, los socinianos en un afán de racionalizar la Biblia, negaron la Trinidad ya que para ellos solamente el Padre es divino y Cristo es un hombre dotado con cierta gracia divina. Conceptos abrazados no solo por el unitarismo sino también por los Testigos de Jehová.
La doctrina de la Trinidad en la actualidad
Actualmente la doctrina de la Trinidad es debatida en algunos círculos cristianos. Mientras escribo este post, se ha destacado en algunos medios de difusión teológica el debate entre los trinitarios complementarianos. Un lado afirma la subordinación funcional eterna del Hijo (SFE), mientras que el otro lado afirma solamente la subordinación económica del hijo (clásico o no SFE).
Un tema y debate muy profundo, que posiblemente puede abrir la puerta a profundizar en el conocimiento de nuestro Dios.
Y contestando nuestra pregunta inicial: ¿Por qué creer en la doctrina de la Trinidad? Porque la Biblia lo enseña.